En general las adiciones, a diferencia de lo que ocurre con los aditivos, se agregan al hormigón en
cantidades importantes, por lo que es necesario tenerlas en cuenta al determinar la composición volumétrica del hormigón.
Podrán utilizarse adiciones, para modificar favorablemente alguna de las propiedades del hormigón o conseguir ciertas características especiales tales como aislamiento térmico o acústico, determinada coloración, etc.
Tienen el carácter de adiciones, las escorias, cenizas volantes, ciertos polvos minerales, materiales
inertes, como los colorantes, materiales no minerales, de naturaleza orgánica, tales como ciertas resinas sintéticas. etc.
Al utilizar adiciones con el hormigón no deben sobrepasarse valores límites ya que, en caso contrario, pueden resultar perjudicadas la durabilidad del hormigón o la protección contra la corrosión, sin que esta influencia desfavorable pueda ser detectada mediante ensayos previos de corta duración.
Nota: Las adiciones de naturaleza orgánica sólo podrán utilizarse previa justificación mediante estudios detallados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario